domingo, 11 de enero de 2009

Olé! Paella

¡Feliz Año! Ya volví de mis merecidas vacaciones y aquí estoy de nuevo para traerles las reseñas de los lugares para comer en Hermosillo.

Anoche, indecisos a dónde ir a cenar, se me ocurrió la idea de ir al Olé! Paella.

Pues bien, el Olé! es un restaurantito de comida española que está sobre el Blvd. Morelos #89 pasando la Av. 7, o sea que si van a de Sur a Norte, pasan la Alfredo Eguiarte y en el siguiente semáforo dan una vuelta en U y ahí lo van a tener.

El restaurante antiguamente estaba sobre el mismo Morelos pero mucho más atrás, a lado de la Fabula Pizza del avión, casi esquina con Rodríguez.

El lugar es un poco pequeño, hay unas cuantas mesas y está en una especie de patio cubierto por una lona aunque también tiene una pequeña sección techada de un par de mesas (donde está la barra). A lado hay un estacionamiento bastante grande así que ni porqué preocuparse por eso.

La decoración está muy bien trabajada; todo para acentuar el concepto del restaurante (el rojo), todo está en la misma tonalidad, jeje. Es un lugar agradable con mesas rústicas, frases pintadas por aquí o por allá, con buena música (¡¡Bravo!!) muy variada que va desde flamenco, cantantes españoles nuevos y no tan nuevos, un Gustavo Cerati que se coló por ahí, etc, pero en general muy buena música (Aunque el volumen estaba algo alto). Un ambiente tradicional - moderno.

El trato es muy bueno. Recibidos en la entrada por el dueño, creo, y con un trato muy deferente (sí, deferente) y amable. En la mesa fuimos bien atendidos aunque al masero se le olvidó por ahí algo que le pedimos y tuvimos que volverlo a pedir pero bastante bien el trato por parte de él también.

Fuimos en plan de "tapear" (comer tapas, es decir algo para comer mientras tomas) así que pedimos puras tapas (tapear, tapas, tapas ¿y qué? jajaja). Patatas bravas (que no están nada bravas, aunque la salsa estaba riquísima), camarones al ajo (deliciosos), chistorra y patatas ali oli (ambas también muy buenas) y para pasarnos todo nos echamos un Rioja, Viña Vial. (Creo que al dueño no le pareció que le haya pedido un Ribera del Duero... mi novia y yo llegamos a la conclusión de que tal vez sea de la Rioja, jajaja.). Pero bueno, el vino estaba muy bueno también una vez que se abrió bien.

En el menú figuran ensaladas varias, paella (por supuesto) y una variedad de postrecitos tradicionales que de nuevo no los probé por ... comer tanto, jaja.

Nos la pasamos de lo lindo, platicando, tapeando, tomando vino, escuchando la música, etc.

El precio de la comida está relativamente decente, de hecho lo único que subió la cuenta fue la botella del vino ($330), pero pues en fin, era restaurante te triplican el precio del vino como si fuera la única botella en Hermosillo. Pero ahí les va un dato bastante interesante: pueden llevar su botella y sólo te cobran el descorche que son como $150 pesos, o sea que si ya tienes por ahí una (de Ribera por ejemplo :p) puedes llevarla.

Pues bien, este restaurante no perdió la calidad desde aquella vez que fui hará hace unos... ¿3, 4 años? Aunque me gustaba más el otro local. Está excelente el ambiente ahí para ir a echarse la copa, tapear, pasar el rato (hay un tablero de dardos y ahí estaba una pareja jugando). Hay un sillón donde se me antojó para estar en un grupo más nutrido echandote unos vinos. El trato es muy amable aunque si algo distante y la comida está riquísima. Plus: cierra a las 2:00 am.

Muy recomendable, muy interesante para comer algo diferente aquí en Hermosillo que hasta donde se, no hay otro restaurante de comida española.

Por último les dejó una de las frases pintadas en el restaurante: "El que bien come y bien bebe sólo de viejo se muere".

¡Salud!

Sale!!

Calificaciones:
Lugar: * * * * *
Servicio: * * * *
Sabor: * * * * *
Precio: * * * * *